Pautas del trabajo:
Profesión - Albañil
Genero - Terror
Historia Completa: Sin Rastro
Según los lugareños en aquel lugar funcionaba un antiguo Instituto para pacientes con problemas mentales conocido por todos como la Residencia Terton. Esta fue demolida para construir en su sitio un hotel para los viajantes que llegaran al lugar y e aquí el principio de nuestra historia.
Luego del comienzo de la obra, una gran cantidad de albañiles comenzaron a sentirse intimidados, observados y a escuchar ruidos en distintos lugares de la construcción, pero el más afectado fue uno de los albañiles nuevos quien comenzó a oír voces que le decían que si la obra se concluía resultaría un mal muy grande para toda aquella ciudad,
con este objetivo intento intervenir de mil formas la manera de parar la obra; con el tiempo sus compañeros empezaron a apartarse de el, caratulándolo de loco. Poco a poco el convencimiento de aquel albañil acerca de que algo muy malo iba a ocurrir si se finalizaba el hotel crecía en desmedida.
Una noche lluviosa, muy común en esta parte del país, el albañil se dirigió a la construcción con la intención de destruirla totalmente. La tormenta era cada vez más fuerte así que procuro hacer todo lo más rápido posible e irse; una vez colocadas las cargas explosivas se dirigió a la salida, pero con su poca experiencia en este tipo de cosas no calculo bien el tiempo de retraso de las bombas y la explosión lo atrapo mucho antes de que pudiera escapar.
Al día siguiente luego de remover los escombros se encontraron con el albañil aún con vida pero ya con el último aliento, uno de los médicos vio que aquel intentaba decir algo así que acerco su oído, el albañil dijo “…Jamás terminaran la obra.” y luego dejo de respirar.
La construcción siguió pero en los meses siguientes todo comenzó a empeorar, primero los objetos de trabajo comenzaron a desaparecer, todos culpaban a los indigentes de la zona de hurgar de noche y llevárselos, pero después un hecho cambio todo, una tarde cuando ya todos se habían marchado, el sereno de la obra escucho ruidos en el segundo piso acompañado de varias voces, se dirigió allí con el motivo de ver si alguien estaba aun en la obra, mientras subía las voces se escuchaban mas fuertes, pero al llegar no encontró a nadie, le pareció ver una sombra al final del pasillo y la siguió, al dar la vuelta una gran silueta fantasmal se abalanzo sobre el envolviéndolo totalmente y llevándoselo hacia la oscuridad.
Jamás volvieron a saber de aquel sereno y fue el principio de una seguidilla de desapariciones, los demás albañiles y obreros horrorizados culparon de aquellos hechos al albañil fallecido en la explosión y de su ultimo dicho “…Jamás terminaran la obra.”, desde ese momento todos abandonaron la obra y se rehusaron a volver a trabajar en ella, dejándola sola y olvidada para siempre.
Hoy en día se rumorea que en la construcción abandonada todavía se escuchan voces y de vez en cuando se ve a aquel albañil deambulando por sus pasillos, vigilante y a la espera de llevarse consigo a todo aquel que intente continuar la obra…
Luego del comienzo de la obra, una gran cantidad de albañiles comenzaron a sentirse intimidados, observados y a escuchar ruidos en distintos lugares de la construcción, pero el más afectado fue uno de los albañiles nuevos quien comenzó a oír voces que le decían que si la obra se concluía resultaría un mal muy grande para toda aquella ciudad,
con este objetivo intento intervenir de mil formas la manera de parar la obra; con el tiempo sus compañeros empezaron a apartarse de el, caratulándolo de loco. Poco a poco el convencimiento de aquel albañil acerca de que algo muy malo iba a ocurrir si se finalizaba el hotel crecía en desmedida.
Una noche lluviosa, muy común en esta parte del país, el albañil se dirigió a la construcción con la intención de destruirla totalmente. La tormenta era cada vez más fuerte así que procuro hacer todo lo más rápido posible e irse; una vez colocadas las cargas explosivas se dirigió a la salida, pero con su poca experiencia en este tipo de cosas no calculo bien el tiempo de retraso de las bombas y la explosión lo atrapo mucho antes de que pudiera escapar.
Al día siguiente luego de remover los escombros se encontraron con el albañil aún con vida pero ya con el último aliento, uno de los médicos vio que aquel intentaba decir algo así que acerco su oído, el albañil dijo “…Jamás terminaran la obra.” y luego dejo de respirar.
La construcción siguió pero en los meses siguientes todo comenzó a empeorar, primero los objetos de trabajo comenzaron a desaparecer, todos culpaban a los indigentes de la zona de hurgar de noche y llevárselos, pero después un hecho cambio todo, una tarde cuando ya todos se habían marchado, el sereno de la obra escucho ruidos en el segundo piso acompañado de varias voces, se dirigió allí con el motivo de ver si alguien estaba aun en la obra, mientras subía las voces se escuchaban mas fuertes, pero al llegar no encontró a nadie, le pareció ver una sombra al final del pasillo y la siguió, al dar la vuelta una gran silueta fantasmal se abalanzo sobre el envolviéndolo totalmente y llevándoselo hacia la oscuridad.
Jamás volvieron a saber de aquel sereno y fue el principio de una seguidilla de desapariciones, los demás albañiles y obreros horrorizados culparon de aquellos hechos al albañil fallecido en la explosión y de su ultimo dicho “…Jamás terminaran la obra.”, desde ese momento todos abandonaron la obra y se rehusaron a volver a trabajar en ella, dejándola sola y olvidada para siempre.
Hoy en día se rumorea que en la construcción abandonada todavía se escuchan voces y de vez en cuando se ve a aquel albañil deambulando por sus pasillos, vigilante y a la espera de llevarse consigo a todo aquel que intente continuar la obra…
(autor- sdamov)
